26 de juny 2012

Cajas de ahorros: ¿héroes o villanos?


Cajas y politica: los poderosos


Publicado en la Revista de la Fundación 1º de Mayo nº 41 de Junio 2012

La crisis económica ha provocado la práctica desaparición de unas  instituciones financieras centenarias: las cajas de ahorros. Durante mucho tiempo, habían alcanzado un amplio prestigio como entidades financieras. Por su origen social eran una alternativa a la banca privada y unas entidades enraizadas y vinculadas a la sociedad a la que revertían sus beneficios en forma de obra social. Ahora, después de la repercusión de la crisis en el sistema financiero, parece como si las cajas hubieran sido un nido de corrupción, nepotismo  y mala gestión. Pero, ¿cuál es la verdadera realidad de las cajas de ahorros?

No existe una única realidad de las cajas de ahorros. Han existido cajas bien gestionadas (La Caixa, Ibercaja, Unicaja, las Kutxas vascas, Caja Murcia, Caja Asturias, etc.) y sin problemas  frente a otras donde ha habido una gestión cuanto menos negligente. Las cajas, en su conjunto, han sufrido problemas derivados de la situación económica  y de  la  crisis  financiero - inmobiliaria,  de una supervisión deficiente, de la propia gestión de las entidades, muy diversa entre sí, y, finalmente,  de decisiones  políticas  erróneas en su reestructuración final.

Los problemas

El inicio de los problemas en las cajas tiene lugar en la llamada década de oro de la economía española, es decir, la época del crecimiento económico basado en la construcción, que concluyó con el estallido de la burbuja inmobiliaria. El cual atrapó a todo el sistema financiero, pero con mayor repercusión a las cajas en cuanto banca de las familias, en algunos casos agravado por la influencia exógena de la vinculación o in- fluencia del poder político. Podemos afirmar que, igual que la crisis de la reconversión industrial se llevó por delante la práctica totalidad de la banca industrial, la actual crisis derivada del "crash" inmobiliario ha comportado la caída del modelo de cajas.

Un componente del modelo derivado del crecimiento  económico basado  en el sector  inmobiliario fue el crecimiento exponencial del crédito a todo nivel, potenciado  y exaltado por las  políticas  económicas gubernamentales. Esta exaltación del crédito comportó que la sociedad  viviera en un espejismo de falsa riqueza derivada de la sobreutilización crediticia.  Afectó a todos los ámbitos de la sociedad, desde las empresas hasta los particulares, y, repetimos,  fue auspiciado  por políticas  económicas  y fiscales procíclicas.  Ejemplos son las sucesivas rebajas fiscales, o el mantenimiento de las desgravaciones fiscales por compra de vivienda.

Esta  demanda  de crédito comportó un sobreendeudamiento  externo excesivo de las entidades de crédito, tanto bancos como cajas, así como la relajación de las garantías en la concesión de los préstamos por parte de las entidades financieras. La locura crediticia llevó a excesos  que  ningún regulador  ni autoridad  trató de moderar. Así, vimos que no sólo los particulares  y las familias se endeudaban sino que grandes operaciones empresariales, especialmente inmobiliarias, se efectuaron prácticamente a crédito, sin inversión directa de capital propio.

Tanto bancos como cajas se sobreendeudaron por encima de sus posibilidades sin que, en ningún caso, ni el supervisor ni el Gobierno dieran la más leve voz de alarma. Pero, ¿por qué la crisis repercute de una forma más directa en las cajas que en los bancos?

Cabe  decir que el negocio de los grandes bancos tiene una diversificación internacional que les permite amortiguar el coste de su negocio a nivel estatal. Los problemas derivados de fallidas de grandes promotores afecta, en general, por igual a bancos y a cajas. Donde hay una gran diferencia es en lo relativo a la crisis de promotores  medianos  y pequeños con mucha mayor repercusión en las cajas, entidades más pegadas al territorio. La diferencia se agranda en la repercusión de la crisis, por el gran incremento del paro y la imposibilidad del pago de préstamos en los particulares, que, fundamentalmente, son clientes de cajas más que de bancos. Al ser las cajas la banca de las familias y de los pequeños negocios, la crisis inmobiliaria en
 ellas ha tenido mucha mayor repercusión, afectando, especialmente, a aquellas en las que se ha añadido una gestión deficiente por parte de sus directivos. Esta es la negativa situación general de estas entidades.

A esto se suma en el caso de algunas cajas, no en todas, el del peso de la influencia de los poderes políticos en sus estamentos directivos. Se trata de forma principal del peso del poder político, especialmente autonómico, sobre algunas cajas de ahorros, lo que ha comportado  inversiones en proyectos que eran fruto más de intereses políticos que de perspectivas de rentabilidad financiera. Los casos más significativos son los de las grandes cajas valencianas (Bancaja y CAM) o el de la CCM en Castilla-La Mancha.

La influencia política también estuvo presente en la potenciación de fusiones poco racionales  entre entidades de la misma comunidad; por ejemplo, la de las cajas sevillanas en Cajasol,  o las cajas gallegas que dieron origen a NovaCaixaGalicia.  Cabe afirmar que el problema no es tanto la presencia política en los consejos de administración como el hecho de que las autoridades autonómicas hayan utilizado de forma perversa las competencias que tenían sobre las entidades de ahorros de sus comunidades. La influencia de los poderes políticos va unida a una deficiente, negligente y culposa gestión de los directivos de esas cajas  que aceptaron sumisos la presión política.

Los órganos de gobierno

¿Qué repercusión tiene en la crisis la propia composición de los órganos de gobierno de las cajas?  Puede parecer que la composición de los órganos de gobierno no era, en estos momentos, la más adecuada. Pero ello no debe llevarnos a cuestionar el modelo de representación  en su totalidad. Es evidente que la evolución de las cajas y su función financiera, que en las últimas décadas les ha llevado a equiparar sus actividades a las de la banca privada, no ha sido correspondida con la actualización de sus órganos de gobierno.

Desde CC OO se plantearon modificaciones que mejoraran la composición de los órganos de gobierno de las cajas. La necesidad de limitar el peso directamente político y, especialmente, la de sustituir la representación de los impositores, que en la práctica no se representaban  más que a sí mismos, por entidades sociales representativas, fueron propuestas jamás asumidas por el legislador.

Pero el problema principal ha estado en la omnipotencia de los directivos, fueran directores generales o presidentes  ejecutivos, y la acumulación  de la información en pocas  manos,  con dificultades de acceder a toda ella por parte de los propios miembros de los consejos. Esto no debe escandalizarnos en demasía. Estas mismas situaciones se dan en una gran parte de entidades, no sólo de las financieras sino de empresas en general, incluso en algunas del propio IBEX 35, donde el poder y la información residen en muy pocas manos.

En relación a las retribuciones de sus directivos, es cierto que se dispararon en los últimos años, pero han estado situadas, salvo excepciones, por debajo de las propias de las entidades bancarias. A pesar de ello, ha sido una de las cuestiones me- nos transparentes ya que todo lo relacionado con las retribuciones de la alta dirección no ha pasado siquiera  por los consejos sino únicamente por las comisiones de retribuciones, formadas por sólo tres personas de la máxima confianza de presidentes y directores generales

En las consejos de las cajas existía una representación de los trabajadores, que no de los sindicatos, muy minoritaria, pero que ha sido en muchos casos el elemento más dinámico, por no decir casi el único. Y ello derivado no tanto por la información recibida como consejeros sino por su conocimiento de la propia realidad de la empresa que les permitía ser el contrapunto a la versión oficial. Es cierto que su prioridad en muchas ocasiones ha sido centrarse en la defensa del futuro de las plantillas a las que representaban y a las que cada cuatro años se sometían a su refrendo. Era la única representación que debía rendir cuentas a sus representados.

La reestructuración

Finalmente, requiere especial  atención el modo como se ha abordado la reestructuración de las cajas. Con la crisis se planteó una reestructuración precipitada y ahora podemos afirmar que falta de todo tipo de perspectiva.Así, se potenciaron precipitadas fusiones directas, por un lado, y fusiones frías o SIP,  por otro. Se presionó para la creación de gestión financiera indirecta a través de bancos. Se lanzó la necesidad de apertura al capital privado y, en los casos más extremos, como Banca Cívica y Bankia, se forzó su salida a bolsa de forma arriesgada y se involucró el capital de centenares de miles de pequeños ahorradores.

Es evidente que el resultado ha sido desastroso. En muchos casos  se fusionaron cajas bien gestionadas con otras de gestión deficiente. El resultado es demoledor. Fue poner manzanas sanas junto a manzanas podridas,  produciéndose un contagio negativo en muchas entidades. El problema se hizo cada vez mayor. El caso de Bankia es el más paradigmático. Es posible que Caja  Madrid pudiera tener  problemas,  pero es evidente que en solitario podría haber intentado salir de ellos. Unirla a una entidad como Bancaja,  que junto a la CAM  constituían el emporio de los activos inmobiliarios tóxicos, era sentenciarla al derribo. Fue un engendro político y económico  que sólo podía concluir en un desastre. Los intereses  políticos del PP, dominante en Caja Madrid y Bancaja,  fueron determinantes para una absurda fusión de siete entidades. El resultado lo hemos visto ahora con el coste de más de 23.000  millones de euros para las arcas públicas.

Había otras alternativas desde el inicio, menos costosas y traumáticas. Podían  haberse nacionalizado desde el principio las cajas con problemas, y con sus activos tóxicos crear un parque de vivienda pública de alquiler, y a la vez hacer de esas entidades unas fomentadoras del crédito a las familias y a las empresas. Pero eso habría sido otra historia.

Las cajas de ahorros hoy son ya historia. La sociedad ha perdido cientos de millones de euros anuales del dividendo social que representaban las obras sociales. Además, se abre un futuro de posible exclusión social para los sectores más vulnerables de la sociedad.

MANEL GARCÍA BIEL  | EX-REPRESENTANTE DE LOS TRABAJADORES EN EL CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN  DE "LA CAIXA"

  

Caixaforum Obra Social



                                  Ovidi Montllor: " de Manars i garrotades"

14 de juny 2012

Grecia: ¿Porqué SYRIZA es la alternativa digna?


Alexis Tsipras: SYRIZA

nuevatribuna.es | 14 Junio 2012

El próximo domingo hay elecciones en Grecia y muchos y poderosos intereses, incluyendo la propia Comisión Europea, parecen empeñados en impedir una victoria hoy probable de la izquierda alternativa de SYRIZA ¿Porqué?

Durante los últimos tiempos hemos visto como se ha intentado demonizar, por parte de una gran parte de los medios de comunicación, vinculados a los intereses citados, la coalición de izquierdas tachándola de que representaba poco menos que el caos. La alternativa que se nos ha querido plantear era poco menos que: o el europeismo y la sensatez representados  por Nueva Democracia y el PASOK, es decir los partidarios de  cumplir con el “diktat”, o el caos que comportaría todos los males para los griegos y los europeos personificado en SYRIZA.

La realidad es muy diferente y poco a poco se abre paso. Realmente la coalición de izquierdas representa una ruptura con el pasado y un paso adelante para levantar la dignidad del pueblo griego. Por otra parte lo que plantea la coalición de izquierdas no significa ni romper con Europa ni con el Euro, sino la necesidad de renegociar las condiciones draconianas que están llevando al pueblo griego a la desesperación y sin que vea ninguna perspectiva de salir de un pozo sin fondo.

Parece contradictorio y es impresentable que los grandes dirigentes europeos opten por los partidos tradicionales. Esos mismos gobiernos que mintieron y presentaron las cuentas fraudulentas causa de todos los males. Parece increíble que se prefiera que Gracia continúe en manos de los mismos partidos corruptos que están en el origen de la crisis griega.

SYRIZA es en todo caso una esperanza de cambio. Una esperanza que puede fracasar o no, pero que es lógico que consiga el respaldo de gran parte de los griegos y deberíamos decir de muchos europeos, porque significa un cambio respecto a los que se repartieron durante décadas el control de la política de Grecia y que son los máximos responsables de su situación actual.

Europa, sus gobernantes y especialmente sus ciudadanos deberían contemplar con esperanza un cambo radical en la política griega, y como una garantía de que las cosas pueden cambiar respecto a un pasado conocido y condenable. Creo que esta situación se da más entre muchos ciudadanos europeos con mayor intensidad que en sus gobernantes. Cabe esperar que la esperanza se cumpla, que SYRIZA surja como vencedora en las elecciones del domingo 17 y que los sectores y gobiernos con mayor sensibilidad, comenzando por la Francia de Hollande, tiendan una mano a esta oportunidad, que se imponga la racionalidad democrática en la UE y se emprenda un nuevo camino basado en una renegociación de las actuales condiciones que permita que Grecia y su pueblo puedan cumplir sus compromisos pero a partir de permitir también su recuperación. Seria bueno para Grecia y seria bueno para el futuro de Europa. Una Europa basada en la solidaridad y la cooperación, más que en el castigo y la imposición, que inicie un camino de mayor unidad e integración económica y sobre todo política y social.


                            Theodorakis i Farantouri: " To gelasto pedi"

8 de juny 2012

Oscar Lafontaine una veu europea d’esquerres


Oscar Lafontaine de "Die Linke"

nuevatribuna.es | 10 Junio 2012

El dijous 7 de juny  Oscar Lafontaine va donar una conferencia sobre “l’esquerra a Europa” a la seu de CCOO de Catalunya.

Lafontaine és una persona de llarga trajectòria política, va arribar a ser President del SPD alemany i ministre d’Economia del Govern federal. Va dimitir de tots els seus càrrecs per les seves profundes diferències amb el canceller Schroeder, i posteriorment va participar en la fundació de “Die Linke” ( L’Esquerra) juntament amb els ex-comunistes del PDS.

En la seva conferència Lafontaine va deixar caure amb claredat tot un seguit de conceptes que podrien ser comuns pel conjunt de la gent de l’esquerra alternativa.

En primer lloc considera que actualment la Unió Europea no és una vertadera democràcia sinó que en realitat és una “dictadura financera”. Per a ell, la democràcia significa el govern al servei de la majoria la qual cosa no es dona actualment quan amb  les polítiques d’ajustament la majoria de la població veu retallats els seus drets i condicions de vida. Planteja clarament que tota democràcia ha de vetllat per la igualtat dels desiguals la qual cosa pressuposa normes i regulacions que s’encarreguin de vetllar pels sectors més dèbils de la societat, pel seus drets i per les seves condicions de vida.

El dirigent de “Die Linke” planteja dues mesures, des de l’esquerra per a retornar  Europa a un entorn democràtic, per a la renovació democràtica d’Europa. La primera i fonamental és rescatar els Estats dels mercats financers, la forma hauria de ser clara a partir de l’actuació del BCE, aquest hauria de poder prestar directament als Estats als tipus d’interès, 1%, que actualment dóna als bancs privats per que desprès aquests li comprin el deute als estats al 5 o 6 %.

La segona mesura és la necessitat de reduir el deute dels estats. Per fer-ho el camí no és el de les retallades sinó clarament per fer pagar més als que més tenen, especialment a les grans fortunes. En aquests sentit valora positivament la mesura anunciada per Hollande i compartida pel Front de Gauche francès d’imposar un fort impost, un 70%, als qui ingressen més de 1 milió d’Euros/any.

Altrament planteja la necessitat d’una esquerra més enllà dels actuals partits socialistes, i ho planteja com una opció d’hegemonia de les idees que fins i tot poden arribar a influir en l’actual esquerra social- lliberal per fer-la girar cap a posicions més socialdemòcrates. En aquests sentit l’exemple francès seria demostratiu, una esquerra alternativa a l’alça pot influenciar el plantejament del socialisme tradicional.

Planteja que l’esquerra alternativa s’ha d’entendre com un moviment en la línia d’aquesta renovació democràtica amb objectius clars i capaç de forjar amplies aliances tant dins de la pròpia força alternativa com amb altres subjectes de la vida política i social que permetin avançar cap a un nou model europeu.

L’aposta política de Lafontaine és clarament pro- europeista, creu que en l’actual moment històric cap canvi, profund com els que planteja, és possible a nivell només d’un país, i que només serà possible en àmbit grans com pot ser el de la Unió Europea. Un exemple, en aquest sentit, seria la experiència del Programa Comú dels primers anys de Miterrand que va fracassar davant l’atac que va patir la moneda francesa. De la mateixa manera a l’hora de valorar la capacitat d’actuació de SYRIZA si guanya les eleccions gregues recomana mesures prudents i la aliança de Grècia amb països més sensibles als seus plantejaments i amb pes a la UE com pot ser actualment França. Creu que no es pot demanar una actuació de màxims a SYRYZA ja que sense finançament europeu Grècia es podria veure abocada a una greu situació amb dificultats fins i tot de pagar els salaris dels seus funcionaris.

Pel que fa al plantejament de que és ser d’esquerres avui? la resposta de Lafontaine rememora el retorn a plantejaments clàssics de Marx, diu que ser d'esquerres avui és creure que la única propietat acceptable és la que és fruit del propi treball. Que no és acceptable que algú pugui ser propietari del treball d’altri. Es a dir tornem als esquemes de la diferència entre propietat de bens de consum i bens de producció o conceptes com el de la plusvalua derivats del pensament marxista.

En definitiva podem dir que Lafontaine aporta una visió del que és un plantejament de l’esquerra en l’actual situació europea. Una visió que no cal considerar com la única vàlida però si que és una de les corrents de pensament que poden ajudar a conformar una visió d’esquerres que ajudi a crear una alternativa a l’actual domini de la política de dretes, la de falsa austeritat de les retallades sotmeses als interessos dels mercats financers.

logo de SYRYZA


"Die Moorsoldaten"

1 de juny 2012

¿Provocación?: Caixabank premia a los gestores que hundieron Banca Cívica


Antonio Pulido y Enrique Goñi: ex-Presidentes de Banca Cívica
nuevatribuna.es | 04 Junio 2012
El próximo 26 de junio se celebrará la Junta extraordinaria de Caixabank para aprobar la absorción de Banca Cívica. Además se propone la incorporación al Consejo de la entidad de Antonio Pulido y Enrique Goñi Copresidentes de Banca Cívica.

Estos dos personajes fueron Presidentes de Caja Sol y Caja Navarra respectivamente antes de crear Banca Cívica y los máximos responsables de ésta y de su fracaso. Incluida la salida a bolsa de la entidad en julio de 2011.

El fracaso de su mala gestión es evidente, lo demuestra la necesidad de ser absorbidos ante la imposibilidad de mantener su supervivencia como entidad. Consecuencia de su gestión, los pequeños accionistas han perdido más del 50% del precio de sus acciones. Estos pequeños accionistas eran pequeños ahorradores de las antiguas cajas que confiaron en la seguridad del producto que se les vendió en su momento. Asimismo la gestión ha concluido con la pérdida de 1500 puestos de trabajo entre la plantilla de Banca Cívica, junto a 850 trabajadores más que se verán obligados a una movilidad ilimitada.

Pero los males que afectan a accionistas y trabajadores parece que no vayan a afectar al prestigio de los señores Pulido y Goñi. Ellos se van a beneficiar de entrar a formar parte del Consejo de Administración de Caixabank y continuar como gestores de una entidad mucho mayor. ¿Se merece este premio su gestión anterior en banca Cívica?

El prestigio que si que va a resultar perjudicado es el de Caixabank al acoger en su seno, de forma que parece poco pensada, a los responsables directos del desastroso final de Banca Cívica, que poca cosa positiva pueden aportar a la entidad más bien al contrario, sólo desprestigio.

Caixabank y su Presidente, el siempre inteligente Isidre Fainé, que a su vez es el Presidente de la antigua Confederación de Cajas-CECA, deberían pensarse dos veces la incorporación de unas personas como  Pulido y Goñi que en nada beneficiarán a la reputación ni a la Responsabilidad Social Corporativa de Caixabank. El Presidente de Caixabank y los miembros de su Consejo deberían ser los primeros interesados en no compartir la mesa  del consejo con esa compañía indeseable. Y creo que la mayoría de sus accionistas y trabajadores serían de la misma opinión.

Pulido y Goñi parecen ser alumnos aventajados de Rodrigo Rato, como él han conseguido hundir unas entidades, castigar a sus accionistas y poner en peligro el futuro de los trabajadores de las entidades, y pese a ello salir beneficiados.

Es de esperar que desde las instituciones políticas o judiciales se lleven a término las oportunas actuaciones para la depuración de responsabilidades de todo tipo de quienes han llevado a nuestro Sistema Financiero a ser el primer y principal problema de la grave crisis que padece nuestro país. 

Los ciudadanos de este país comienzan a estar hartos de ver que, mientras se les pide constantemente sacrificios y penurias, mientras se les recorta derechos y servicios públicos, se muevan libremente individuos responsables de fechorías como en este caso  la liquidación de entidades financieras sin pagar ningún precio por ello y por el contrario son recompensados con cargos en entidades mayores.

Los pequeños accionistas y los trabajadores de Banca Cívica, así como el conjunto de la ciudadanía se merecen el derecho de ver que personajes como Pulido y Goñi pagan por sus, como mínimo, graves errores de gestión y desaparecen de la escena como gestores de empresas.      

Isidre Fainè: Pesidente de Caixabank


                                         Jacques Brel: " les bourgeois"